Con el corazón destrozado, la Dra. Fritzi Frühling va a parar a un pequeño pueblo tras heredar una granja. Mientras intenta venderla lo más pronto posible, los habitantes del lugar pretenden que se quede. Fritzi se encontrará de nuevo con su novio de la infancia, el veterinario Falk, y con el misterioso y atractivo vecino Kai...
Mientras Fritzi intenta tomar un café con su vecino Kai, su trabajo como doctora y el trato con sus pacientes deja bastante que desear, por lo que los habitantes de Kanada prefieren ser atendidos por el veterinario, Falk. Sin embargo, Fritzi está segura de que la pequeña hija de un paciente que ha ahuyentado necesita urgentemente tratamiento médico...
La subasta de solteros se acerca y Uwe, el mejor compañero de Falk desde la infancia, no se lo va a perder. Inmediamente se da cuenta de que Falk sigue sintiendo algo por Fritzi, y la novia de Falk también empieza a sospechar lo mismo. Mientras tanto, Kai está continuamente confundiendo a Fritzi, haciéndole creer que oculta algo...
Fritzi y Falk trabajarán juntos cuando el agricultor Hering llega a la clínica con su cerdo. Fritzi tiene más preguntas que respuestas para Kai, y cuando se decide a pedirle una cita, una ex-novia del pasado vuelve a la vida de Kai. Como si su propia vida amorosa fuera poco desastrosa, Fritzi jugará a ser consejera matrimonial de una joven pareja...
Kai desaparece de repente, dejando sólo a su perro, y cuando Fritzi ya tiene suficientes problemas, Cora, la joven hija de una luchadora, le pide ayuda porque la piel de su madre se está volviendo azul. Al recordar su propia infancia, Fritzi intenta proteger a la niña, que está luchando para salir adelante. Tras su amarga decepción con Kai, Fritzi no quiere saber nada más de los hombres. Mientras, un pequeño pingüino es llevado a la clínica por tener una enfermedad potencialmente mortal...
Fritzi se ve envuelta en un accidente y como es la única médico, debe decidir a quién puede ayudar y a quién no. Lo único que quiere Fritzi es irse del horrible accidente lo antes posible, pero cuando una de las víctimas es un donante de órganos, ella intentará ayudarla, abriendo así viejas heridas...
Fritzi debe atender al novio de una chica del pueblo que tiene atravesada una rama en el pecho. Ella intenta ayudarlo, pero realmente no tiene ni idea de lo peligroso que es, así que llama a Kai para que le ayude. Mientras tanto, Falk está tratando de salvar la vista del perro de un niño...
Fritzi se topa con un problema enorme que queda completamente fuera de control y que podría derrumbar todo lo que ha conseguido en Kanada. Debe decidir qué es más importante para ella: su ética como médico o sus nuevos amigos. El bebé de Ellen nace creando una confusión emocional inesperada, y Kai ya no puede esconder más tiempo su secreto...
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